Nos complace ofreceros el testimonio de Julie, una paciente francesa que ha querido contarnos cómo ha sido para ella su experiencia con un final muy feliz.

Mi primer intento de ser madre mediante reproducción asistida fue en una clínica de Inglaterra. No salió bien. Mi ginecóloga me aconsejó entonces que probara con una clínica española, una con sede en Bilbao: iGin. 

Así que no lo dudé. Allí me solicitaron realizarme unas analíticas que hasta ese momento nunca me habían pedido. Y gracias a los resultados de éstas y tras estudiar mi caso, el equipo médico me recomendó entonces el tratamiento indicado: la donación de óvulos.

Y aunque el proceso no fue sencillo, después de tres intentos y cumplidos los 40 años puedo decir que… ¡estoy embarazada! De hecho, acabo de hacerme la ecografía de los tres meses.

Os tengo que decir que en este tiempo todo el equipo de iGin ha estado siempre a mi lado para apoyarme, orientarme, responder a mis dudas y ayudarme a tomar las decisiones adecuadas. No puedo hacer otra cosa que recomendarla a todo el que me pregunté por ella.